Una historia de amor por Dénia, desde 1961
Todo comenzó en 1959, cuando Janet, una de las primeras turistas en descubrir Dénia, se enamoró no solo del lugar… sino también de Miguel Ferrer, un joven visionario local. Aquel flechazo marcó el inicio de algo más grande: un proyecto familiar que, más de medio siglo después, sigue construyendo hogares junto al mar.
Con una mirada de “forastera”, Janet supo apreciar enseguida la calidad de vida que aquí se respiraba. Desde entonces, la familia Ferrer ha vivido y trabajado con un profundo respeto por este entorno único.
Tradición familiar, mirada mediterránea
Durante más de 60 años, en Villas Ferrer hemos cuidado cada proyecto como si fuera nuestro hogar. Diseñamos y reformamos nuestras villas con una sensibilidad artesanal, integrándolas con el paisaje de Dénia, sus playas, su luz y su ritmo pausado.
Hoy, Janet junto a sus hijos —Josephine y Miguel— siguen apostando por un modelo basado en el compromiso, la honestidad y el trato cercano. Nuestros clientes no solo reservan una casa, sino que forman parte de una historia viva.
